«Detrás de cada empresa estamos los hijos y nietos de quienes a mediados de los 70 estaban, quizás sin saberlo, haciendo historia», dijo ayer el actual presidente de la Pimeef, Alfonso Rojo, durante la celebración del 40 aniversario de la fundación de esa asociación empresarial. Durante el acto se repartieron placas conmemorativas a los expresidentes y fundadores, así como a los socios más antiguos. Foto: Diario de Ibiza.

FUENTE: DIARIO DE IBIZA, 18 NOVIEMBRE 2017

José Miguel L. Romero - Santa Eulària

La Petita i Mitjana Empresa d'Eivissa i Formentera (Pimeef) celebró anoche su 40 aniversario en el agroturismo Atzaró con una gala en la que se entregaron placas conmemorativas a todos los negocios y empresarios que han sido fieles a esta asociación desde sus inicios. «Detrás de cada empresa estamos los hijos y nietos de quienes a mediados de los 70 estaban, quizás sin saberlo, haciendo historia», señaló durante el discurso inaugural de la velada Alfonso Rojo, actual presidente de la Pimeef. «Me puedo imaginar –señaló– que la pizca de categoría de esos fundadores que llevamos dentro, será la que nos dé fuerza e imaginación para saber afrontar todos los retos que están por llegar».

Rojo tuvo palabras de agradecimiento «a todo el personal que durante todos estos 40 años ha ayudado y ha formado la gran familia» que es la Pimeef: «Sin ellos todo habría sido más difícil», admitió. El presidente recordó a «todos los empresarios que, desde las directivas de las distintas asociaciones, han invertido horas y horas quitadas a sus familias, a sus negocios para trabajar en beneficio de su sector. Para trabajar, la mayoría de las veces, incluso para su propia competencia?».

Empresas caídas
A juicio de Rojo, las Pitiusas «han superado una de las crisis más duras que se recuerdan, y que ha dejado tras de sí una terrible huella de desempleo y de empresas caídas». Pero, «afortunadamente, la industria turística ha tirado con fuerza hacia adelante» en este periodo, alabó el presidente de la Pimeef. «Los empresarios en las Pitiusas no nos hemos dormido y seguimos mejorando nuestro producto. Hemos hecho los deberes».

Rojo repasó, a grandes rasgos, los diversos periodos por los que ha atravesado la federación durante estas cuatro últimas décadas. Considera que, en la actualidad, «el comercio electrónico es uno de los mayores enemigos» del comercio tradicional. «Esos crecimientos tan enormes que está teniendo deberían hacer replantearnos y adaptarnos a los gustos de los consumidores», alertó. La digitalización y la robotización «prevén unos cambios» que, subrayó, nadie es capaz aún de imaginar. E hizo un aviso a navegantes al respecto: «Uno de cada dos puestos de trabajo actuales peligrarán».

«Siempre por delante»
En nombre del Banco de Sabadell, Óscar Prohens, su jefe de zona, destacó el papel que durante estas cuatro décadas ha tenido la Pimeef, que «siempre ha ido por delante» y que «ha sido una herramienta fundamental para que las autoridades conocieran las verdaderas necesidades e hicieran política». Porque, a su juicio, «los empresarios son los que mejor saben cómo están las cosas».

Salvador Losa, edil del equipo de gobierno de Santa Eulària (sustituyó al alcalde de la localidad, que no pudo asistir por cuestiones de agenda) comentó que la Pimeef tiene «todo el respaldo institucional» de su municipio: «Sois los que vertebráis la economía de Ibiza», resaltó en su discurso.

La consellera de Presidencia del Govern balear, Pilar Costa, también habló de la pequeña y mediana empresa como «el elemento clave para la cohesión de este pueblo», y aseguró que las instituciones siempre estarán de su lado, dado que es preciso «transformar el crecimiento económico en bienestar social».

El presidente del Consell de Ibiza, Vicent Torres, ofreció un discurso en el que recordó que hoy en día la Pimeef está constituida por unas 1.300 empresas que dan trabajo a cerca de 13.000 personas. Torres considera que las pequeñas y medianas empresas tienen un papel fundamental «a la hora de diversificar el tejido productivo», así como para «dinamizar pueblos y zonas rurales». Destacó, en ese sentido, «su insustituible función a la hora de generar confianza» en la economía.

«Más allá de velar por sus asociados –indicó el presidente ibicenco–, la Pimeef ha demostrado a lo largo de estos años su vocación de servicio por la población». Por ejemplo, citó su movilización continua por la mejora de transporte aéreo y marítimo, así como por una financiación acorde con la relevancia económica y productiva de este archipiélago. Como hizo previamente Alfonso Rojo, alertó sobre el peligro que representan las grandes compañías para las pequeñas y medianas empresas, aunque aseguró estar «convencido» de que saldrán adelante y sabrán «afrontar con garantías» el futuro gracias a su esfuerzo y constante mejora. Igual que previamente afirmó Salvador Losa, el presidente del Consell aseguró que la institución que representa «colaborará con la Pimeef en todo lo que sea mejorar el tejido empresarial».

Placas a los fundadores
Uno de los principales actos de la noche fue la entrega de sendas placas conmemorativas a Armando Marí Torres y Jaime Marí Bufí, firmantes del acta fundacional de la Pimeef. Armando Marí recordó, tras recibir ese recuerdo a su labor, los comienzos: «Teníamos la intención de constituirnos en una asociación, pues los trabajadores ya tenían sus sindicatos. Nosotros, como empresas, estábamos dejados de la mano de Dios». Ayudó a su creación «el abogado Joan Ribas», de Sant Antoni. Las primeras reuniones para crear la Pimeef se celebraron en una estancia del edificio del teatro Pereyra, según rememoró. «Éramos unos novatos», confesó. En aquellos comienzos «el principal problema era el del intrusismo», así como el de los horarios comerciales: «Este sí que fue cómico. Cada comercio tenía un horario. Quisimos poner uno para todos y recurrimos a la pime de Palma para que nos ayudara. Nos dieron los suyos, pero al poco tiempo vimos que no funcionaban. Intentamos crear uno nuestro... Pero fuimos incapaces de ponernos de acuerdo, de manera que volvimos a recuperar el que nos habían dado desde Palma».

Inigualable Smilja
Este empresario de la confección cree que una de las actuaciones más acertadas fue «el gran impulso dado a Adlib», alabó el papel que tuvo, como relaciones públicas, Smilja Mihailovich: «Era inigualable. Aunque había que atarla en corto porque para gastar no tenía límites». En esos inicios también eran constantes los follones «entre los chiringuitos de playa y los restaurantes».

«Aquellos comienzos fueron difíciles», dijo otro de los firmantes de esa acta fundacional, Jaime Marí Bufí, «aunque la gente tenía más ganas de hacer cosas que ahora». Eso sí, se siente orgulloso de «la semilla sembrada hace 40 años».

También se entregó una placa a los expresidentes de la Pimeef de estas cuatro décadas (a excepción de los dos primeros, Antonio Riera y José Riera Torres, fallecidos), que recogieron José Colomar, Mariano Riera, Joan Tur Ripoll y Bartolomé Planells. Este último resaltó que durante su presidencia, entre 1981 y 1987, las dificultades eran máximas: «Eran tiempos difíciles. Empezábamos la democracia y el Consell y el Govern apenas tenían atribuciones. Ahora nos reconocen las instituciones, pero en esa época éramos una cosa rara». Las primeras luchas fueron contra la creación de un duty free en el aeropuerto, así como contra la venta ambulante y el elevado coste de la financiación en los bancos.

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